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viernes, 9 de mayo de 2014

Cómo meter un elefante en la cáscara de una nuez

Este texto es muy divertido, y fue publicado en abril por Ediba. Que lo disfruten!



      Muchas veces me han preguntado cómo meter un elefante dentro de la cáscara de una nuez, y yo, como buen arquitecto que soy les digo que eso es muy fácil. Algunos se asombran al escuchar mi respuesta, pero cuando les explico cómo hacerlo, les queda muy claro.
       Lo primero que se necesita es un elefante. Africano o asiático, para este experimento es lo mismo. El tamaño de las orejas no modifica el resultado final. Porque saben que la diferencia entre uno y otro es que los africanos tienen las orejas mucho más grandes, ¿no? Para conseguirlo pueden viajar en barco o en avión hacia África o hacia Asia, también es indistinto. En auto o tren no es recomendable porque se dificulta atravesar el océano en alguno de estos vehículos. O pueden conseguirlo en el zoológico más cercano a su casa.
      Una vez conseguido el paquidermo, procederán a conseguir la nuez, objeto mucho más sencillo de hallar. Se puede obtener primero la nuez y luego al mamífero, eso es a gusto de cada experimentador.
        Nueces se pueden recolectar de cualquier nogal o comprar en algún supermercado del barrio. Es indispensable que la nuez tenga su cáscara, y no conseguirla pelada. Si encuentran una nuez pelada no servirá para el experimento en cuestión.
       Luego deberán proceder a abrirla, de forma cuidadosa y sin romper la cáscara, ya que es el elemento necesario, junto con el elefante, para la realización de esta experiencia. Con una de las mitades de la cáscara es suficiente. La misma puede ser abierta de distintas formas y con casi todas lograr el éxito. No se recomienda arrojarla desde un décimo piso, ya que no solo se destrozará al chocar con el pavimento, sino que además, puede dañar a algún transeúnte desprevenido. Recomendamos utilizar un cascanueces como primera opción. Deberán colocar la nuez entre ambas pinzas, y presionando con suavidad, pero con fuerza, se logrará abrir el fruto. Otra alternativa es usar el marco de la puerta, donde se encuentran las bisagras. Apoyar la nuez entre puerta y marco, con la puerta abierta, y cerrar gradualmente hasta escuchar el sonido característico de la nuez al romperse. Crac. Se repite la metodología si la nuez no fue abierta. Otra forma también recomendable es apoyar la nuez en el piso, y con un calzado suficientemente duro –no usar alpargatas, ojotas o estar descalzo, ya que podría perjudicarse el experimento, y su pie– pisar con el talón hasta romperse. Un martillo también puede servir como herramienta de apertura de dicho fruto.
       Con la nuez ya abierta, pueden o ingerir el fruto o guardarlo para regalárselo a un amigo. Es muy importante colocar la cáscara de la nuez de forma cóncava sobre el suelo. Es decir, con el hueco hacia arriba, para que el elefante pueda introducirse sin dificultad.

         Luego se acercan al paquidermo y con una mano en su lomo y otra junto a su oreja, le hablan despacio y con cariño, y le piden por favor que se meta en la cáscara de la nuez. Puede ser que el elefante quiera meterse, pero puede ser que no. No deben usar la fuerza para meter al animal dentro, esto podría enfurecerlo y acto seguido romper la cáscara de la nuez. En este caso deberían iniciar el proceso de búsqueda y apertura del fruto nuevamente, ocasionando una demora importante en el experimento. Por eso recomendamos no apresurar al animal. En algún momento se introducirá en la cáscara, y habremos finalizado el experimento.